El mantenimiento de la bicicleta es esencial para su correcto funcionamiento y, por ello, si utilizamos la bicicleta a menudo, de vez en cuando necesitamos realizar revisiones periódicas para asegurarnos de que todas las piezas continúan teniendo una buena calidad. Existen diversos motivos para querer cambiar las piezas de una bicicleta, como, por ejemplo, el de mejorar su calidad, el de realizar ajustes si hemos cambiado también el tipo de entrenamiento que queremos hacer o el del desmonte de las piezas si necesitamos viajar con la bicicleta.
Más allá de todo esto, también podemos encontrarnos ante la situación de que necesitemos instalar nuevas piezas en nuestra bicicleta después de que estas hayan sufrido daños y necesitamos repararlos o reemplazarlos. Una de las partes más fundamentales de las bicicletas son sus pedales, así que en este artículo queremos explicarte cómo ajustar el pedal de la bicicleta, en el caso de que queramos sustituir los pedales de la bicicleta.
Cómo puedes imaginarte, cada bicicleta es diferente, si queremos saber cómo quitar el pedal de la bicicleta vamos a necesitar seguir unas instrucciones generales. También resulta importante que tengamos en consideración los ajustes concretos de cada marca y cada estilo de bicicleta. Para ello, a continuación, queremos traerte una pequeña guía en la que te explicamos cómo se cambian los pedales de una bicicleta paso a paso, de modo que si necesitas repararla puedas llevar a cabo este proceso tú mismo:
Pese a que puede parecer innecesario, lo cierto es que en cada manual de instrucciones de las bicicletas encontraremos el manual de mantenimiento, lo que puede resultar bastante útil si queremos saber cómo quitar el eje de los pedales de la bicicleta. En este manual de instrucciones se detallará el tipo de bicicleta y la llave para quitar los pedales de la bicicleta que vamos a necesitar, puesto que en ocasiones podemos utilizar una llave hexagonal, una llave de 15 mm, de 8 mm o de 6 mm o una llave Allen.
En el caso de que no tengamos a mano este manual de instrucciones de la bicicleta, tampoco es el fin del mundo, ya que simplemente podemos determinar qué herramientas hacen falta para desmontar los pedales de la bicicleta echándole un vistazo al acople hexagonal que podemos encontrar en el brazo de la biela. Lo más habitual es que las bicicletas utilicen una llave hexagonal, ya sea de 6 mm o de 8 mm, para el proceso de montaje. En el caso de que los pedales de tu bicicleta no tengan un acople hexagonal, entonces seguramente vayas a utilizar una llave de 15 mm.
Como ya hemos mencionado, una vez que tengamos claro si encontramos el acople hexagonal o no, podemos pasar directamente a probar la llave que nos hace falta. Si no tienes clara la medida, prueba a introducir una llave hexagonal de 6 mm y otra de 8 para ver cuál se adapta mejor y, una vez que una de estas encaje, ya habrás encontrado la llave para desmontar el pedal de la bicicleta. En algunos modelos también se puede utilizar simplemente una llave Allen, así que lo principal será determinar esto para poder pasar al siguiente paso.
Antes de comenzar a manipular los pedales tenemos que considerar qué tipo de bicicleta tenemos, puesto que en algunas ocasiones podremos trabajar con la bicicleta anclada en el suelo y, en otras, necesitaremos utilizar un soporte para bicicletas que nos ayude a extraer estos pedales.
Este es el apartado más importante y donde ya vamos a comenzar a quitar los pedales. Una de las preguntas más comunes es la de dónde se aflojan los pedales de la bicicleta, y lo cierto es que cada uno de los pedales se afloja en una dirección diferente. Es imprescindible tener esto en cuenta, puesto que de lo contrario no seremos capaces de quitar los pedales. Para ello, hay que saber que el pedal derecho gira en el sentido contrario a las agujas del reloj y el pedal izquierdo gira en el sentido de las agujas del reloj. Con esto listo, ahora nos pondremos manos a la obra.
Habiendo ya deducido qué llave hace falta para desmontar el pedal de la bicicleta, lo siguiente será introducir esta llave en el acople. En este caso, giramos hacia la derecha para poder extraer el pedal izquierdo. En algunas ocasiones, inclinar la biela hasta que el pedal quede inclinado hacia abajo puede ayudarnos en la extracción. Otro consejo es que resulta muy importante que en ningún momento forcemos la herramienta. Debemos asegurarnos de que la llave que utilizamos se sujeta correctamente al tornillo para evitar que la cabeza pueda lastimarse.
Cuando aplicamos fuerza debemos asegurarnos de que la herramienta está bien introducida en su sitio, ya que de lo contrario podemos terminar por estropear el tornillo y, en ese caso, no seremos capaces de extraer el pedal. Con todo esto debemos situarnos de frente a la bicicleta y girar la llave en el sentido de las manecillas del reloj.
En este caso, tendremos que repetir la explicación que acabamos de comentar. Situándose en una posición adecuada y cómoda, colocaremos la biela hacia abajo para asegurarnos de que la llave se introduzca correctamente en el acople correspondiente. Sin poder dañar el cabezal del tornillo, giraremos en este caso hacia la izquierda o en el sentido contrario de las manecillas del reloj para extraer el pedal derecho de la bicicleta.
Cuando notemos que el pedal está lo suficientemente suelto, podemos quitarlo de forma sencilla, pero trataremos de sacarlo en una posición recta y paralela a la biela para evitar que tanto la rosca como el pedal y el tornillo puedan dañarse.
Una vez que ya hemos retirado ambos pedales de la bicicleta, llega el momento de sustituirlos. Primero debemos cerciorarnos de que las roscas en el interior de la biela y en el pedal están limpias, lubricarlas e insertarlas en su sitio, repitiendo el proceso de extracción del pedal pero a la inversa. Es importante que los movimientos que realicemos sean fluidos y suaves y que en ningún momento forcemos ninguno de los mecanismos, puesto que si lo estropeamos entonces el pedal quedará inservible. De nuevo, hay que prestar extrema atención en no dañar en ningún momento el cabezal de las roscas para que seamos capaces de introducir y extraer los pedales siempre que nos haga falta.
Como bien hemos comentado al comienzo del artículo, los motivos para cambiar el pedal de una bicicleta pueden ser muy diferentes. En algunas ocasiones podemos cambiar los pedales de la bicicleta porque son demasiado pesados, porque ocupan demasiado espacio y molestan a la hora de guardar la bicicleta, porque simplemente se han gastado o se han roto, etcétera. También podemos cambiarlos por motivos estéticos o funcionales. Con esto claro, lo más importante a la hora de quitar el pedal de una bicicleta es entender cómo quitar el eje de los pedales de la bicicleta y cómo ajustar el pedal de la bicicleta debidamente para asegurarnos de que, con este cambio, todo queda en su sitio y podemos utilizar la bicicleta con total seguridad.